¿Qué es el Tantra?
El Tantra deja de lado la mente y se enfrenta a la vida cara a cara, sin pensar si esto es bueno o esto es malo, simplemente acepta y se enfrenta a lo que hay. Por lo tanto, es difícil decir que es una actitud ante la vida, más bien y, de hecho, es todo lo contrario, una no-actitud.
Tantra no enjuicia el por qué de los devenires de la vida, es la mente la que necesita intelectualizar la vida y encontrar explicaciones para ella. Tantra simplemente experimenta la vida. No quiere entender la verdad, sino como convertirse en ella. Y busca la experiencia directa a través de unas técnicas que nos permiten pasar a una transformación total.
Por lo tanto, el Tantra es pura existencialidad, que a través de ella se encuentra el camino que conduce a la liberación.
Tantra desafía los condicionamientos adquiridos por la mente desde nuestra niñez, desafía los tabúes, las doctrinas y dogmas de cualquier religión. Sin embargo, aunque el Tantra es una rebelión cognitivo-social contra preceptos morales y represivos, no difunde ni el libertinaje ni la pornografía, sino la observación del ser humano con todas y cada una de sus condiciones, aceptando que todo él: cuerpo, mente y espíritu provienen de la misma fuente, del Todo.
Muchos caminos espirituales niegan el cuerpo, el deseo y el sexo. Tantra acepta el cuerpo como sagrado, el deseo como puente de trascendencia y el sexo como fuente de placer, meditación y éxtasis espiritual.
La búsqueda del Tantra es la felicidad y el éxtasis. Solo son necesarios dos ingredientes para alcanzarlos, la presencia y el amor. Presencia para vivir solo el aquí y el ahora, sin depender del pasado ni del futuro. Y el Amor, consecuencia de haber logrado el éxtasis, o ausencia de la mente, mediante la meditación y la canalización de las energías, principalmente las energías sexuales.
La energía sexual es fuente de placer, de vida y de transformación, está muy ligada a la conciencia y a la meditación. Sería como un acto artístico, donde cada uno es el artista y la obra a la vez.
El Tantra, debidamente practicado, cura, regenera, rejuvenece, vitaliza y aporta energía positiva para la vida cotidiana, más magnetismo y poder personal. Como camino de autococimiento y superación personal, la práctica del Tantra aumenta la autoestima, la sensación de valía personal, la capacidad de vivir cada instante, de tomar decisiones y buscar la armonía. Ayuda a curar y sanar las heridas emocionales y los bloqueos psíquicos que se puedan tener, ya que la invocación continua del amor, el amar a la vida y la permanencia consciente en sensaciones de plenitud y gozo, aumentan y potencian la conciencia de que la vida es realmente bella y agradable con nosotros.
¿Qué debe tenerse en cuenta para cultivar el camino del Tantra?
- La primera y más importante: no te acerques al Tantra buscando sexo.
- La segunda es la potencializacion del amor y la compasión: ama a todo lo que te rodea.
- La tercera, querer cultivar tu YO interno: abandonar la mente para entrar en tu conciencia.
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